Vaya palabreja ¿no?
Schadenfreude es un término alemán que recoge la idea de “regodearse” del mal ajeno. Está compuesta por dos palabras “Schaden” que significa desgracias o infortunios y “Freude” que se traduce como alegría.
Recientes investigaciones (Revista Science, Takahashi, 2009)
demuestran que somos capaces de generar dopamina, el neurotransmisor que tiene
que ver con el placer y la recompensa, cuando experimentamos Schadenfreude.
Sentir Schadenfreude también
puede llevarnos a sentirnos culpables y malas personas por disfrutar de las
desgracias ajenas. Lo cierto es que cuando la desgracia es moderada, la
aceptamos, pero cuando la desgracia es grave, suele despertar en nosotros la
compasión. Nadie se ríe de una enfermedad grave de una persona salvo que el
motivo de conflicto entre ellos sea algo muy injusto, como puede ser haber sido
engañado y que ese engaño te llevara a perder tu economía, tu casa, tu familia,
etc.
Sentir Schadenfreude es normal y
es humano. No te sientas mal por ello. Pero sí trata de regular tus emociones
para que sean tus propios esfuerzos y logros los que te hagan sentir bien, no
las desgracias ajenas.
Algunos párrafos de esta entrada han sido tomados del blog: plenamente
de “El país”
ACTIVIDAD:
Comenta el video. ¿Cómo te has sentido al verlo?
¿Crees que lo que has visto en el vídeo es habitual?
¿Por qué sentimos las personas esta emoción, a priori cruel?
¿Qué podemos hacer cuando veamos a alguien disfrutar del
”mal ajeno”.
FORMULARIO DE RESPUESTA ACTIVIDAD 21
https://forms.gle/
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.